Terapia Conductual
1. Definición de la Teoría Conductual
La Psicoterapia Conductual es un enfoque terapéutico basado en los principios del condicionamiento clásico y operante, desarrollados a partir de los estudios de John B. Watson, Ivan Pavlov y B.F. Skinner. Esta teoría sostiene que la mayoría de los comportamientos humanos —incluidos los desadaptativos— son aprendidos a través de la experiencia y pueden ser modificados mediante el aprendizaje.
El objetivo de la terapia conductual es cambiar conductas problemáticas por otras más adaptativas, sin centrarse en los procesos inconscientes o en la historia personal profunda del paciente. El enfoque es activo, directivo y orientado al presente, basado en la observación del comportamiento y la medición de resultados.
2. Técnicas de la Teoría Conductual
Las técnicas conductuales se basan en los principios del aprendizaje y están orientadas a modificar conductas específicas. Algunas de las más utilizadas son:
-
Condicionamiento clásico:
-
Desensibilización sistemática: Técnica gradual usada para tratar fobias, en la que se expone al paciente a estímulos temidos mientras aprende a relajarse.
-
Exposición con prevención de respuesta: Se expone al paciente al estímulo temido sin permitir la conducta evitativa.
-
Condicionamiento aversivo: Se asocia una conducta no deseada con un estímulo desagradable para reducir su aparición.
-
-
Condicionamiento operante:
-
Refuerzo positivo/negativo: Se refuerzan conductas deseadas para aumentar su frecuencia.
-
Castigo positivo/negativo: Se aplica un estímulo negativo o se retira uno positivo para reducir una conducta.
-
Economía de fichas: Sistema de recompensas utilizado especialmente en niños o contextos institucionales.
-
-
Modelado (aprendizaje por observación): El paciente aprende nuevas conductas observando a otros, especialmente al terapeuta.
-
Entrenamiento en habilidades sociales y solución de problemas: Se enseña al paciente conductas nuevas y efectivas para relacionarse y afrontar dificultades.
3. Trastornos donde se puede aplicar la Terapia Conductual
La Terapia Conductual ha demostrado gran eficacia en el tratamiento de múltiples trastornos psicológicos, especialmente aquellos con manifestaciones observables y específicas. Algunos de ellos son:
-
Trastornos de ansiedad (fobias específicas, trastorno de pánico, ansiedad social)
-
Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
-
Trastornos de conducta en niños y adolescentes
-
Trastornos del espectro autista (intervenciones conductuales tempranas)
-
Trastornos alimentarios (como la bulimia y el trastorno por atracón)
-
Trastornos del sueño
-
Adicciones
-
Déficit de habilidades sociales
-
Trastornos de tics (como el síndrome de Tourette)
Este enfoque es especialmente útil cuando se desea un cambio conductual observable en un periodo relativamente breve, y suele ser la base para intervenciones estructuradas y bien sistematizadas.
Comentarios
Publicar un comentario